Las cifras no lo acompañan, pero el dólar no se rinde

Hola Amigos, buen día. Después de los datos de inflación conocidos el martes, el miércoles se conocieron en Estados Unidos las ventas minoristas y las cifras de inflación mayorista. Las primeras quedaron apenas por encima de lo esperado el mes pasado, en tanto el índice mayorista cayó fuerte. Sin embargo, el dólar volvió a escalar posiciones.

Claro que no lo hizo en la misma proporción en todas sus paridades. Con los aumentos de los rendimientos de los bonos del Tesoro como principal argumento, el billete creció nuevamente ante el yen, frente al cual quedó a las puertas de un nuevo máximo anual. En tanto, el euro retrocedió casi 80 puntos durante la sesión americana, mientras la libra esterlina retrocedió en buena forma luego de rozar 1.2500 el martes.

La onza de oro se mueve en un rango de precios estrecho, impulsado a la baja por la fuerza del dólar, y al alza por un recrudecimiento del conflicto bélico en Medio Oriente. Por el momento, la onza mantiene un perfil ligeramente bajista en el corto plazo, aunque las ganancias de las últimas 48 horas, de más de 30 dólares, muestra que la tendencia del metal precioso el alcista en los gráficos de largo plazo.

Si la corrección alcista del dólar se detiene en los niveles actuales, se tratará de un movimiento que pasará rápidamente al olvido. Con el euro como moneda insignia, el dólar deberá quebrar la zona de 1.0730 para retomar una tendencia alcista más sustentable, algo poco viable en las primeras horas del jueves. Si ello ocurriera, la libra caería debajo de 1.2300 y el yen superaría sus mínimos anuales de 151.88.

Los informes que se van conociendo no favorecen al dólar las próximas semanas. Así como los datos de empleo de octubre decepcionaron a los poco creíbles pronósticos, los datos de manufacturas y servicios no sorprendieron gratamente, y la inflación cayó fuerte el mes pasado. Todo esto genera una suerte de alivio para la Reserva Federal, que parece haber terminado su ciclo de aumentos de interés, que inició en marzo de 2022, con una inflación récord en 40 años.

La inflación es el mal de este tiempo en todo el mundo. En Estados Unidos ya se ubica en el 3.2% interanual en la medición general y en el 4% en la que excluye alimentos y energía. Pero los indicios de que la economía comenzará a sufrir próximamente son suficientes para que el banco que lidera el Sr. Powell se abstenga de buscar en los aumentos de tasa la solución al problema. En síntesis, el dólar no parece tener mucho para ganar, en tanto la bolsa de Nueva York, deseosa de liquidez, vuelve a brillar como en sus mejores horas.

La sesión del jueves tiene como principales atractivos las peticiones semanales de subsidio por desempleo, y el índice de la Fed de Filadelfia. El euro tendrá una buena oportunidad de acercarse a 1.0900, en tanto la libra podría buscar otra vez la esquiva zona de 1.2500. El yen puede recuperar posiciones si el dólar cae, y si los rendimientos de los bonos no crecen. Además, está siempre pendiente la intervención de Japón, como las que ya ha practicado en varias oportunidades en los últimos meses.

Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el viernes.