Hola Amigos, buen día. El dólar ganó la contienda del martes ante las monedas principales, después de un inicio muy flojo. El euro llegó, una vez más, a un máximo de varios meses, al tocar 1.0965, una firme resistencia que no pudo vencer, coincidente con el 61.8% de retroceso de la baja 1.1274/1.0447, máximo y mínimo del año. En tanto, la libra esterlina volvió desde sus máximos, también de varios meses, para buscar la zona de 1.2500.
Las Minutas de la última reunión de política monetaria de la Fed no dejaron mucho para el análisis. La visión de los oficiales del FOMC se mantuvo dentro de lo previsto, sin aumentar la tasa de interés y sin intenciones de hacerlo en los próximos tiempos, salvo algún rebrote inflacionario no previsto. Eso sí, el Comité no piensa recortar la tasa hasta bien entrado 2024, lo cual es una señal de alerta para Wall Street. Sin embargo, las acciones principales siguen creciendo, con el índice Nasdaq en máximos de 22 meses y el resto de los índices en máximos de varias semanas.
El buen clima de negocios no se ve opacado entonces, y el dólar parece prepararse para una nueva baja. Este miércoles será un día casi de transición, dado que el jueves la actividad será nula en Estados Unidos, por el Día de Acción de Gracias.
Sin embargo, la publicación de las peticiones semanales de subsidio por desempleo y el índice final de confianza del consumidor de la Universidad de Michigan podrían impactar en los pares del dólar.
El euro deberá mantenerse sobre la zona de 1.0865 para volver a buscar máximos por encima de los del martes. La superación de 1.0930 sería ideal para la moneda única, que no tendrá muchos desafíos hasta el viernes, cuando se conozcan los datos de manufacturas y servicios en Alemania y la Eurozona. El quiebre de 1.0965 le abrirá las puertas a 1.1010, próxima resistencia de importancia.
La libra esterlina puede buscar 1.2585, que es el 50% de retroceso desde el máximo anual hasta el mínimo 1.2035, desde donde sufrirá una fuerte corrección bajista. La misma, que en realidad ya comenzó desde bastante más abajo, podría adelantarse si la moneda británica pierde la cota de 1.2480.
El yen, en tanto, retrocedió más de 130 puntos desde su máximo en 147.14, nivel que tocó luego de una furibunda recuperación en la sesión asiática del martes. Este movimiento demuestra que el yen tiene vida propia y no está dependiendo en estos días de los rendimientos de los bonos del Tesoro, que bajan lentamente. Sin señales de intervención, y con el euro, la libra esterlina y el dólar australiano estables, la moneda nipona puede estar recuperando posiciones ante la salida de posiciones de carry trade, que son habituales cuando las tasas son tan altas en Estados Unidos, Reino Unido, Europa o Australia, y negativas en Japón, como ocurre actualmente. El quiebre de 148.00 podría darle un nuevo impulso al yen, aunque su sobrecompra de corto plazo no parece permitirle ir mucho más allá de 147.70.
La onza de oro obtuvo ganancias importantes el martes, superando nuevamente los 2000 dólares. De este modo, el metal precioso ofrece un panorama alcista, que deberá confirmar superando la zona de 2015 dólares en el corto plazo. De otro modo, una corrección bajista de importancia, que lo lleve a la zona de 1960 dólares, es lo que puede esperarle a la onza.
Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el jueves.