Hola Amigos, buen día. La onza de oro quedó al borde de tocar máximos históricos el viernes, cerrando a 2071 dólares, apenas de 9 dólares de los niveles que logró el 4 de mayo en 2080 dólares. A la vez, el yen mostró una buena recuperación al alcanzar 146.60, un nivel que no tocaba desde el 12 de septiembre pasado. El denominador común de estos movimientos son las caídas de los rendimientos de los bonos del Tesoro de Estados Unidos.
La presunción, cada día más fundada, de que la Reserva Federal no aumentará la tasa de interés en los próximos tiempos y, en cambio, podría comenzar a recortarla antes de lo previsto, determina una baja del dólar en varios frentes. Sin embargo, el euro no logra destacarse entre los activos más favorecidos por la baja del billete, cotizando por debajo de 1.0900. La libra esterlina y el dólar australiano sí parecen sacar provecho de esta circunstancia.
Volviendo al oro, el final de la tregua en Medio Oriente también influye para su nuevo rally. Llamativamente, cada vez que la onza alcanzó los niveles actuales, lo hizo en forma aislada, tanto en 2020, cuando en agosto de ese año el mundo intentaba salir lentamente de la pandemia, como en 2022 y 2023, en el máximo de mayo pasado antes mencionado.
En esta oportunidad, el oro se había visto debilitado en los días previos al comienzo del conflicto bélico en Medio Oriente. Sin que el dólar se mostrara especialmente fuerte, la onza cayó más de 80 dólares en pocos días, para frenar en 1810 dólares. El viernes 6 de octubre despertó imprevistamente para dejar un gap muy marcado en 1834 dólares, que no cubrió. Desde allí, el oro no dejó de crecer, dejando otro gap, poco perceptible, en 1922 dólares. Si bien la semana anterior no se mostró especialmente volátil, en las últimas dos sesiones se disparó, para quedar en los niveles del cierre del viernes en 2071 dólares.
Pasando a las noticias, el presidente de la Fed. Sr. Powell, habló el viernes y, si bien por supuesto no dio pistas del todo claras, lo cierto es que los mercados descuentan que no se producirán aumentos de tasa. De allí es que la agenda de esta semana será clave para confirmar tal presunción.
Como siempre, la primera semana del mes acapara los informes de empleo, que le darán forma a la tendencia del dólar. Las vacantes de empleo podrían quedar debajo de la medición de octubre, en un dato que se conocerá el martes; el miércoles será el turno de la encuesta de empleos privados de ADP, y el viernes, el de las nóminas de empleo no agrícolas. Ambos informes se esperan con mejoras respecto a las cifras de octubre.
También tendremos el ISM de servicios, informe clave del sector más importante de la economía estadounidense, la tasa de interés del Banco de Canadá y la crucial cifra de inflación de China.
Como quedó dicho, el dólar inicia esta semana en posición bajista, con el euro luchando por regresar por encima de 1.0900, algo afectado por la presunción de que el Banco Central Europeo suavizará su política monetaria en los próximos meses. La libra esterlina aparece sobrecomprada en el corto plazo, por lo que se impone una rápida corrección bajista, probablemente en la sesión americana de este lunes. El yen parece tener más para ganar si los rendimientos de los bonos siguen bajando. Su objetivo se ubica cerca de 145.00.
Respecto a la onza de oro, no extrañaría que, después de un movimiento violento en su favor que lo lleve a un nuevo máximo histórico, se desinfle para buscar la zona de 2000 dólares.
Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el martes.