Hola Amigos, buen día. Las negociaciones de paz en Europa del este sufrieron un duro traspié el viernes, cuando una pelea pública entre los líderes Trump y Zelenzky dejó sin efecto cualquier acuerdo en ese sentido. Los aliados europeos de Trump miran ahora con gran recelo la relación entre el estadounidense y su colega ruso Putin, a quien apoya con firmeza. La situación impactó en el euro, que volvió a caer la semana pasada, quebrando 1.0400, y con indicios de caídas adicionales para los próximos días.
Esta situación generó un rebote alcista del oro, que frenó su caída en un soporte importante, 2830 dólares, donde técnicamente encontró una línea de tendencia alcista medida en el gráfico diario. Sin embargo, salvo que supere 2900 dólares, el oro no parece tener mucho más para ganar en el corto plazo.
Más allá de estos movimientos, que igualmente fueron medidos y cautelosos, el mercado de divisas no ha presentado variaciones importantes en las últimas semanas. La incertidumbre que genera la andanada de anuncios de aranceles a las importaciones a Estados Unidos, sin que cada país sepa cuando le toca comenzar a tributar por sus exportaciones, mantiene en vilo a los mercados.
La bolsa de Nueva York sufrió durante la última parte del mes este clima enrarecido, aunque logró, en el cierre del viernes, borrar parte de sus pérdidas de la semana pasada. Así, tanto el Dow Jones, como el S&P 500 y el Nasdaq 100 comenzaron a recuperar terreno en la tarde del día 28.
La semana que comienza está repleta de informes. Las cifras de ISM de manufacturas y servicios en Estados Unidos serán definitorias el lunes y el miércoles respectivamente. Ambos datos muestran un crecimiento sostenido de la economía, con especial énfasis en las cifras de manufacturas, que en febrero quedaron por encima de los 50 puntos por primera vez desde noviembre de 2022.
También se conocerán los datos de empleo, tanto los de la encuesta ADP del sector privado, previstas para el miércoles, como las nóminas no agrícolas el viernes, junto con la tasa de desempleo. La creación de empleo se mantiene firme, aunque cayendo respecto al año anterior, en tanto la tasa de desempleo se mantiene baja, en torno al 4%.
En materia de política monetaria de los bancos centrales, el BCE dará a conocer su anuncio el próximo jueves, con un recorte de tasa previsto, por lo que quedaría en el 2.65%, ampliando aun más la brecha respecto a la Fed.
También se presentará el gobernador del Banco de Japón, Sr. Ueda, en una cumbre del FMI en Tokio, el martes por la mañana.
El dólar inicia el mes con signos de fortaleza. El probable recorte del BCE podría impulsar una caída fuerte, y la zona de 1.0200 aparece en los monitores. La baja de la semana pasada fue moderada, y el anuncio de la Sra. Lagarde podría ser definitoria.
Respecto a la libra esterlina, si bien ha perdido posiciones, se mantiene más firme que el euro, cerrando el mes pasado en 1.2577, con una ligera tendencia bajista. Solo el quiebre de 1.2520 podría impulsar una baja adicional de la moneda británica, algo que no vemos viable en la sesión del lunes.
En cuanto al yen, cerró la semana a 150.66, con un dólar que comienza a tomar fuerza de nuevo. El Banco de Japón dejó en claro que no es su intención aumentar la tasa de interés este mes, pese a que los datos de inflación de Tokio se ubican en máximos de varias décadas. Esto ocurre pese a que los rendimientos de los bonos del Tesoro cerraron el viernes en mínimos de varios meses.
El oro mantiene una tendencia alcista en todos los plazos, aunque está dando algunos signos de debilidad desde varios días atrás. El quiebre de 2820 dólares podría generar una caída de la onza, con objetivos en 2790 y, más abajo 2750 dólares.
Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el martes.